El monumental portacontenedores Ever Given, operado por la compañía naviera Evergreen, encalló el miércoles 24 de marzo en el Canal de Suez, en Egipto, debido a los fuertes vientos de 40 nudos y la consecuente tormenta de arena. El carguero se ladeó por la fuerza del viento y la arena atascó la nave que bloqueó de un extremo a otro el canal con sus 400 metros de largo y sus 59 metros de ancho.
El tráfico marítimo se detuvo en Suez, un canal por el que circula el 10% del comercio internacional por mar. Lo primero que ocurrió fue que el petróleo crudo Brent subió 6% y el barril se colocó sobre los $64 dólares. La oficina de coordinación de la Gulf Agency Company en el canal, detalló que ese día, de los 30 barcos que tenían previsto cruzar, la mitad se quedaron detenidos. Tan sólo dos días después son más de 100 cargueros que esperan su turno para pasar. Cabe mencionar que Top Carriers transportaba contenedores en cinco barcos distintos en esa misma ruta y fecha, afortunadamente, lograron pasar antes de que ocurriera el encallamiento.
La situación es apremiante. Las autoridades egipcias desplegaron un plan de rescate que contempla tres etapas:
- Con apoyo de 9 remolcadores intentar liberar el barco.
- Una excavadora está retirando la arena para dragar el canal.
- Con grúa, aligerar la cargar de la nave y vaciar el combustible para lograr que vuelva a flotar
Siete días después y casi 400 barcos atascados entre Europa y Asia, el plan de las autoridades del Canal de Suez y un equipo holandés de la empresa Smit Salvage funcionó. El portacontenedores Ever Given fue reflotado aunque se estima que tardarán tres días más en liberar por completo el canal. Sin embargo, el tráfico global podría tardar semanas o meses en reestablecerse.
Cuando ocurre un evento de esta naturaleza, los gastos de avería y salvamento se dividen entre los embarcadores que llevan carga abordo.